La presencia de peligros eléctricos y los riesgos inherentes asociados con la energía eléctrica en los lugares de trabajo requieren la adopción de medidas fundamentales para garantizar la seguridad eléctrica y mitigar los riesgos de quemaduras, electrocución, arco eléctrico, descargas eléctricas y otras lesiones de gravedad. En circunstancias extremas, estos peligros pueden desencadenar incendios o explosiones, constituyendo amenazas significativas para la vida, la propiedad y la seguridad general del lugar de trabajo y de quienes lo ocupan.
La prevención, control y eliminación de los peligros eléctricos se logran al identificar los factores que contribuyen a ellos y al contar con un plan de acción integral. Las causas más recurrentes incluyen:
- Aislamiento insuficiente: con el tiempo, el aislamiento eléctrico puede deteriorarse dejando cables expuestos y aumentando el riesgo de descargas eléctricas o cortocircuitos.
- Falla del dispositivo de protección: la ineficacia en la detección de la corriente de falla de aislación por parte del dispositivo de protección compromete su función, elevando el riesgo de choque eléctrico.
- Aparatos eléctricos dañados: conexiones sueltas, cables deshilachados pueden ser el origen de fallas eléctricas.
- Uso inadecuado de cables de extensión: conexiónes en cadena y sobrecargas pueden resultar en sobrecalentamiento, generando incendios eléctricos.
- Mantenimiento inadecuado: la falta de inspecciones regulares de los sistemas eléctricos, la omisión de las señales de advertencia y la negligencia en los procedimientos de seguridad puede desencadenar graves riesgos eléctricos con el tiempo.
El Decreto 351/79, en uno de sus anexos, establece las condiciones de seguridad de las Instalaciones Eléctricas, haciendo referencia al cumplimiento de la reglamentación para la ejecución de instalaciones eléctricas en inmuebles, de la Asociación Argentina de Electrotécnicos (AEA).
El sistema de puesta a tierra, junto con los dispositivos automáticos de corte de energía, desempeñan un papel crucial en la protección de la integridad de las personas y de las instalaciones. Por este motivo, la Superintendencia de Riesgos del Trabajo reglamenta mediante la Resolución SRT Nª 900/15 el Protocolo para la Medición de Puesta a Tierra y la verificación de la continuidad de las masas en el ambiente laboral.